El 12 de mayo es el Día Internacional de la Fibromialgia, una patología que cada vez la sufren más personas que sienten un dolor generalizado, pero no saben ponerle nombre a su dolencia.
En España, casi un 3% de la población está diagnosticada de fibromialgia siendo más frecuente en las mujeres que en los hombres (lo padecen un 85% de mujeres), y aunque puede manifestarse a cualquier edad, es en la edad media cuando más predomina. En 1992 fue reconocida por la Organización Mundial de la Salud.
La fibromialgia, también llamada «enfermedad invisible» por su complejidad a la hora de diagnosticarla, está englobada dentro de los llamados Síndromes de Sensibilización Central al igual que el Síndrome de Fatiga Crónica que afecta al sistema nervioso, al sistema inmunológico, al endocrino y tiene un cuadro sintomático muy amplio.
La principal característica de la fibromialgia son los dolores crónicos generalizados y sostenidos en el tiempo durante al menos 3 meses, y que se focalizan principalmente en el aparato locomotor. Por ello se considera una enfermedad reumatológica.
Las causas que desencadenan la fibromialgia aún no están claras, aunque hoy en día el colectivo científico apunta a que se produce por una alteración de ciertos neurotransmisores del sistema nervioso.
El dolor generalizado que suelen tener los pacientes con fibromialgia es a consecuencia de una alteración en la modulación del dolor. Ellos perciben de forma anómala los estímulos sensoriales e interpretan el calor, la presión o las vibraciones como dolorosas.
Algunos síntomas de la fibromialgia
Dolores musculares
Fatiga y cansancio generalizado
Rigidez corporal
Calambres en las extremidades
Agarrotamiento
Trastornos del sueño
Ansiedad o depresión
Debido a que el principal síntoma es el dolor permanente en la musculatura y las personas afectadas presentan una mayor sensibilidad a la presión en determinados puntos del cuerpo, el protocolo médico ha establecido los llamados «puntos gatillo». Se trata de un total de 18 puntos de dolor que están ubicados en las inserciones tendinosas y estos puntos, presentan una mayor sensibilidad al dolor que en el resto del cuerpo.
Pautas para aliviar los síntomas de la fibromialgia
Quienes sufren de fibromialgia ponen de manifiesto la dificultad con la que se encuentran cada día para seguir llevando a cabo sus actividades cotidianas. Si es tu caso y la padeces, te damos algunas pautas para minimizar y aliviar los síntomas de esta enfermedad.
Olvídate de los estimulantes
El café, el alcohol, la teína o las bebidas con cola es mejor mantenerlas alejadas. Los estimulantes alteran tu ciclo del sueño, provocan los llamados despertares nocturnos e impiden que puedas conciliar el sueño.
Apúntate a las cenas ligeras
No retrases demasiado la hora de cenar para que puedas hacer una buena digestión antes de irte a dormir. Evita frituras, carnes rojas o alimentos muy procesados para cenar. Elige platos más ligeros como las ensaladas, pescado, sopas o cremas de verduras.
Di sí al ejercicio físico
Contrariamente a lo que puedas creer, el ejercicio físico es muy beneficioso porque te ayudará a recuperar la fuerza y la musculatura. Consulta con tu médico qué tipo de ejercicio es el más beneficioso para ti, quizá te aconseje alguno que se adapte a ejercitar ciertos grupos musculares.
Combate el estrés
Algo primordial para las personas con fibromialgia es mantener el estrés a raya y para esto puedes practicar alguna técnica de relajación como por ejemplo la meditación, asistir a clases de yoga o apuntarte a la práctica del taichi.
¿Conoces la Co-enzima Q10?
La Asociación de Fibromialgia AFIBROM ha llevado a cabo un estudio con pacientes con fibromialgia y la suplementación vía oral de Co-enzima Q10. El resultado ha sido muy satisfactorio, se ha observado una mejora en los síntomas generales, llegando en algunos casos, a los niveles de normalidad.
Se ha demostrado que en muchos pacientes con fibromialgia existe una deficiencia de Co-enzima Q10 y que esta deficiencia está relacionada de forma directa con la inflamación.
Pasea por la naturaleza
El contacto con las plantas y los entornos naturales regulan los ciclos neuronales. Existen estudios que demuestran que pasear de forma regular por el campo, un bosque o un parque, provoca cambios fisológicos con efectos antiinflamatorios, relajantes y que ayudan a reforzar tu sistema inmunológico.
Consume más alimentos antiinflamatorios
Existen alimentos que contienen de forma natural ciertas sustancias antiinflamatorias y si los incorporas a tu dieta habitual, te ayudarán a aliviar los síntomas de la fibromialgia. Que no falte en tu lista de la compra alimentos como el ajo, el jengibre, la cúrcuma, el brócoli, las coles, la piña, la cebolla y la mayoría de verduras de hojas verdes.
Aunque los síntomas de la fibromialgia son claros todavía continúa rodeada de una nebulosa, por eso tarda en diagnosticarse entre 5 y 8 años. Aunque se llama la «enfermedad invisible» es muy real y muy dolorosa para quienes la sufren. El reto es que, entre todos, hagamos que deje de ser invisible. ¿Te apuntas?