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Cómo tomar el sol para protegerte del melanoma y obtener los beneficios del astro rey

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Ya ha llegado el verano y con él las vacaciones, los días de playa y de sol, pero es importante que sepas cómo tomar el sol para obtener todos sus beneficios y evitar las posibles complicaciones que puede tener el hacerlo de forma poco prudente.

Nos gusta estar bronceados y que la piel tenga un bonito tono dorado pero esto no debe de ser a costa de excesivas exposiciones al sol o a imprudencias que pueden desencadenar en problemas de piel como son los melanomas.

Cada año se diagnostican más de 4000 nuevos casos de melanoma en España, una enfermedad que afecta más a las mujeres que a los hombres. Los expertos dermatólogos recalcan que este tipo de cáncer se puede evitar siguiendo unas pautas que son de sentido común, pero que se suelen pasar por alto.

Entre esas pautas está el seguir una adecuada protección solar en los primeros 15 años de vida. Con solo este gesto se consigue reducir las probabilidades de desarrollar algún tipo de melanoma en un 75%, porque la piel tiene memoria solar.

El ponerse moreno es un acto de defensa de la piel a la exposición solar. Cuanta más radiación solar recibas sin la correcta protección, tu piel va perdiendo la capacidad de producir melanina, una sustancia encargada de protegerte de las radiaciones solares.

Las radiaciones ultravioletas del sol son las más perjudiciales, las que dañan la piel y de las que tienes que protegerte a la hora de tomar el sol.

Estar años y años bronceándote sin hacerlo correctamente, te lleva a que el mecanismo de defensa natural de tus células se agote, apareciendo así el envejecimiento precoz, las manchas en la piel y en el peor de los casos, posibles melanomas.

como tomar el sol

Cómo tomar el sol adecuadamente

Estar bronceado se asocia con vacaciones, diversión y relax pero todo esto no está reñido con tomar el sol de forma respetuosa con tu piel y tu salud. Estos son los consejos que tienes que tener en cuenta para tener una piel saludable:

Evita las horas de mayor radiación solar

Entre las 12.00 y las 16.00 horas evita tomar el sol. En ese horario es cuando hay mayor cantidad de radiación ultravioleta, la que provoca daño celular, alergias solares y envejecimiento de la piel.

Empieza poco a poco

La recomendación de los dermatólogos es que los primeros días, la exposición directa al sol no debe ser superior a 10 minutos y siempre evitando hacerlo entre las 12.00 y las 16.00 h.

También tienes que tener en cuenta tu tipo de piel a la hora de tomar el sol, porque los efectos no son iguales para una persona con piel clara que para otra que tenga la piel más oscura. Aunque en ambos casos las primeras exposiciones son las de mayor riesgo debido a que la piel está más sensible a las radiaciones solares.

Protégete de la cabeza a los pies

Dicen que la piel perdona pero no olvida así que siempre es mejor que cubras tu piel y no la expongas directamente al sol. Puedes usar sombreros para proteger tu cabeza, si son de ala ancha mejor, gafas de sol con cristales que lleven filtros para la radiación UV y por supuesto cubrir tu cuerpo con alguna prenda de color claro.

Ponte morena sin quemarte

Un error frecuente es ponerte el protector solar cuando ya estás en la playa. Es importante que lo apliques antes de salir pero también es muy importante que repitas la operación cada dos horas si estás en la playa o en la piscina.

Ponte una cantidad generosa, no escatimes y hazlo en todas las zonas del cuerpo que quedan expuestas al sol. Recuerda que un buen protector solar debe tener como mínimo un factor de protección 30 para que proteja tu piel adecuadamente.

Protección solar en cápsulas

Una buena protección comienza desde el interior. Antes de la llegada del verano puedes comenzar a proteger tu piel de las radiaciones solares desde dentro. ¿Cómo? Con un buen suplemento alimenticio de vitamina C.

La vitamina C te ayuda en la formación natural de colágeno para mantener tu piel saludable, al mismo tiempo que protege tus células del envejecimiento prematuro. Con esta vitamina tendrás un aliado natural para que tu piel esté saludable desde el interior.

Apúntate al color naranja

Los alimentos también pueden proteger tu piel para que puedas tomar el sol con mayor seguridad. Los alimentos de color naranja y algunos de color rojo contienen betacarotenos, un pigmento natural que se convierte en vitamina A cuando es asimilado por tu organismo.

Incorpora estos alimentos en tu dieta diaria para proteger un poco más tu piel a la hora de tomar el sol: zanahorias, melocotones, albaricoques, pimientos, calabaza, tomates, cerezas y boniatos.

Que necesitamos de la luz solar es un hecho ya que es fuente de vitamina E, pero lo que no necesitamos es una exposición excesiva al sol, ni que la piel se vea agredida o que tenga que reaccionar de forma exagerada activando su mecanismo de defensa por haber sido imprudentes. ¿El reto de este verano? Tomar el sol de forma responsable.

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